No es el momento de enfrascarse en discusiones sobre la culpabilidad política de nuestra actual situación económica social; habrá tiempo. Los acontecimientos y actuaciones pasadas son conocidas, están ahí, tienen fechas; y nombres y apellidos. La suerte está echada.
Ahora, es tarea de todos salir del atolladero en el que estamos inmersos. Si seguimos en discusiones banales, sin actuar, corremos el riesgo de agravar aún más la situación, que no puede ser más desastrosa; de premio Guinness, si lo hubiera.
Los resultados sobre el paro, conocidos recientemente, hasta el 31 de diciembre de 2.011, demuestra que el índice de desempleo, 22,85%, no es común a todas las comunidades españolas; es la media de todo el país.
Sorprende el País Vasco, con un desempleo de 12,61%; también Navarra, con un desempleo de 13,82%. La diferencia hacía la baja con respecto a la media nacional, es de -10,24% y -9,03% respectivamente. Mientras que Andalucía, con un desempleo del 31,23; también Islas Canarias, con un desempleo de 31,00%. la diferencia hacía la alza con respecto a la media nacional, es de 8,38% y 8,15% respectivamente. La diferencia de paro entre los extremos: País Vasco & Andalucía es del 18,62%. Es evidente que los porcentajes de paro de Andalucía, arrastran a una buena parte de la geografía española, por mayoría de población y escasa productividad.
País Vasco y Navarra, son industriales; no existe la temporalidad. Mientras que Andalucía y Canarias, son agrícolas y zonas turísticas; ambas actividades son temporales. En mi opinión, Andalucía debería industrializar parte de los productos agrícolas que produce, al igual que productos pesqueros. Es decir, crear industrias de bienes de consumo. Se dá la paradoja de que en Navarra existen fábricas que procesan frutas y hortalizas procedentes del sur.
Hasta la próxima semana, gracias y suerte, jnf.
